MORRIÑA / AÑO 2018

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Elijo un único pensamiento, un sonido único, una sensación térmica…
Elijo un lugar para quedarme allí observando, escuchando, sintiendo el entorno...
Elijo estar lejos de todo, lejos de la gente, lejos del tiempo...
Elijo vivir como un ave marina.

No necesito nada, no vale la pena cargar con cosas inútiles.
El Fuego debe estar siempre encendido y el agua próxima a mi.
La ¨terriña¨ no pertenece a nadie.
La ¨terriña¨ es de quien la cuida pisándola con pies descalzos y sin dejar huella.
Se trata de volver a la esencia más primitiva y ocupar el lugar que se nos ha otorgado.
​Se trata de ser verdadero, y así ser libre, como un ave marina...